Ahhhh Pecas. Qué cosa más bella que Pecas. Ya sea bañándose en la playa, trepando arboles o apuntando una pistola a la cara de alguien. Sí… ya es tiempo que escriba algo sobre Kate.
El resto y el video después del salto...
La escena que quiero compartir en esta ocasión es del capítulo Adrift, donde encontramos a nuestra heroína maniatada por Desmond, quien además la ha arrojado a una pieza oscura. Hay que tener en cuenta que Desmond no había interactuado con nadie en meses. Eso reciente los modales de cualquiera.
Kate trata de zafarse del cable que la ata, contorsionándose, sudando como solo los personajes de Lost sudan. Me gustan los detalles técnicos de la escena: Un plano muy cerrado de Kate. Pornográficamente cercano, uno casi siente el estar amarrado. Me recuerda esa escena de Kill Bill cuando la novia está atrapada en su propio ataúd (épica por lo demás). Otro detalle es la sutil música de procedimiento. Y la escasa luz, solo la que entra por la rendija de la puerta, ocultando el gran secreto que hay en la habitación.
Finalmente, logra liberarse gracias al cuchillo que le entregó antes John Locke, hombre de cuchillos. Se para, prende el interruptor y…
CANTIDADES COLOSALES DE COMIDA!
Kate sonríe como quien sabe que pronto podrá comer algo que no sea pescado o jabalí. Pero escapar de la habitación es lo primero, mal que mal es Kate, y Kate siempre quiere escapar. Pasa algo con lo que no cuenta, mientras apila cajas para huir por el techo, descubre el objeto del deseo: Apollo Bar. Full O’Nuts. Kate no puede resistirse, mira el chocolate con deseo, le pega un buen mordisco a uno, se roba otros cuantos, y solo entonces, prosigue con su escape.
Todo el asunto con las barritas Apollo es brillante. Rompe un poco el molde de Kate, la hace más humana, regalándole una escena que podría ser de Hurley. Que más humano que comer, que extrañar la comida, sobre todo los dulces. Cualquiera que haya acampado, entiende perfectamente el lugar en que se encuentra Kate, cuánto valen esos dulces en ese momento. Gran escena, cero diálogos, grande Kate.
